miércoles, 30 de abril de 2008

Feria del libro...una tradición

En todas las familias, quizás más o menos expresado, las tradiciones tienen lugar a medida que las generaciones van dejando huellas.
Si hay algo de lo que puedo ser plenamente consciente es que los libros, la práctica de la lectura, siempre se me inculcó de alguna manera u otra; el arte de la comunicación siempre tuvo protagonismo en mi formación, en mi educación. En los inicios fueron mis padres quienes sembraron la semilla del "tiempo de lectura" como "tiempo de goce, de placer"...tiempo de y para uno. Las metodologías que usaron fueron varias y sin sentido de enumerarlas, pero una de ellas, que aún mantengo (entre otras), es pasar horas peregrinando entre cubículos de diferentes editoriales que lo único que anhelan es captar la completa atención de todos y de cada uno de los cazadores de historias, de conocimiento, de humor, de crecimiento...en fin, de los lectores.
Esos pabellones que se terminan convirtiendo en laberintos eternos, esos pasillos cargados de emociones, de suspenso, de terror, de datos aún desconocidos, de personajes por descubrir, esos stands en los cuales los lectores esperan horas por un "mano a mano" con el creador de la obra. Hoy, todo ese contexto ya forma parte de una salida obligada en mi rutina de librería.
Ayer, el primer acercamiento a esas hojas que implicaban tiempo y dedicación.
Mañana, el momento perfecto para dejar volar la imaginación y seguir nutriendo a la mente con términos diversos...
Hoy, la 34º Feria Internacional del Libro en Buenos Aires...

martes, 29 de abril de 2008

"Suspiro poético"

Abuelo
Si tan sólo hoy pudieras leer mis palabras,
te costaría entender la manera
en que heredé tu pasión por las letras,
por los libros, por la poesía...
por explorar metáforas nunca antes personificadas.
Con tus versos
enamoraste a más de un apasionado solitario.
Yo simplemente
quiero recordarte en el arte de escribir, de leer-te.
Imaginar igualarte, jamás.
Acaso intentar alcanzarte, menos aún.
Me contento con que llegue ese momento
de la comunión de nuestras obras.
Sólo quiero expresarte
que si mis suspiros alcanzaran,
te haría llegar mis letras sueltas,
que intentando buscar el significado adecuado,
te encontrarían produciendo lo inexplorado.